Vuelves

Y ahí estaba parado, esperándome, con el brillo en los ojos, con mezcla de ternura y miedo por cómo sería mi reacción al verle. Me acerqué confusa y empezó a susurrar:

 "Te prometo que si me dejas, te iré a buscar cada día al trabajo y te llenaré de sorpresas los domingos por las tardes para que sean mejor que los viernes. Te contaré cuentos cada noche antes de irte a dormir, y te diré cada mañana lo preciosa que estás, sobretodo cuando despiertes a mi lado. Te abrazaré fuerte cuando menos lo merezcas, porque sé que será cuando más lo necesites. Y si te portas bien, te llevaré a ver las estrellas dónde no haya contaminación, que sé que te encantan. Te prometo paseos por la playa agarrados de la mano, besos con un poco de arena y bañeras con bomba de sales rosa. Me dejaré perder porque me gusta como te pones de insportable al chincharme, pero sé que me abrazarás para compensar las mil de cal luego. Puedo prometerte más, pero no quiero, porque necesito este tiempo para empezar a demostrar. Estoy contigo pequeña, y tú?"